La migraña es un trastorno doble. Genera un sufrimiento espantoso sin que la persona esté aparentemente afectada. Por una parte has de soportar ese dolor y por otra esa horrible incomprensión.
No sé de cuál de las dos genera más sufrimiento. Si te rompes una pierna recibes el cariño y el apoyo de los demás; si tienes una migraña espantosa que no te deja vivir, no hay nada que lo indique, no se comprende ese sufrimiento, ese infierno.
Problemas por coger bajas, compañeros que te miran raro, médicos que no te comprenden, toda esa vida social que te has perdido, el miedo a que tu pareja algún día deje de estar ahí, no poder disfrutar de tu hijos, fiestas que se convierten en luto…
La comunidad científica no ha entendido cómo funciona el dolor y la migraña. Cada día leo atónito artículos de supuestos expertos asándose en conceptos ya obsoletos, recomendando fármacos que no curan pero machacan la salud.